Sept. 6, 2002: Diario Las Américas, Miami (FL)

Brasília: físico cubano pide "pruebas" o "retractación" a embajador de Cuba

El diplomático cubano acusó al Dr. López Linares de "calumniar" al pueblo cubano y de colaborar con organizaciones que tendrían un "historial" de "acciones terroristas"

BRASÍLIA Sept. 5, 2002 (DI) - El físico cubano Juan López Linares, que actualmente hace estudios de post-doctorado en una conocida universidad brasileña y que reclama ante las autoridades de su país el derecho de viajar a conocer a su hijo Juan Paolo, de 3 años y medio de edad, envió carta al embajador de Cuba, Jorge Lezcano Pérez, solicitándole que "pruebe" o que "se retracte" de las graves acusaciones efectuadas por el representante castrista contra él.

Según afirma Lezcano Pérez, en misiva al senador Eduardo Suplicy, que infructuosamente intercedió por el Dr. López Linares, éste estaría participando en una campaña "calumniadora" contra el "pueblo cubano", vinculado a "organizaciones" y "elementos" del exterior con un "historial" de "acciones terroristas".

López Linares, que recibió del senador Suplicy copia de la carta del embajador, responde a éste recordando que según el sabio principio del derecho romano, "quod gratis asseritur, gratis negatur": ante una acusación gratuita, puede el acusado negarla lisa y llanamente; pero que proviniendo de la más alta autoridad diplomática de Cuba en Brasil, que representa con sus dichos al gobierno cubano, esa acusación adquiere otra dimensión y lo obliga, en defensa de su "honra de cubano y de padre de familia, a no poder permanecer en silencio" y a solicitarle las pruebas. "En caso contrario, y a falta de pruebas, como Vd. sabe, señor embajador, la acusación pasa a recaer sobre el acusador".

El embajador acusó también a López Linares de "haber violado" reiteradamente "normas migratorias cubanas", destinadas a proteger la "seguridad nacional" y a disuadir la "emigración ilegal". A ese respecto, el físico cubano, para ejercer su inalienable derecho de defenderse, solicita copia integral de dichas "normas" con base en las cuales está siendo condenado, así como la fecha exacta en que ellas habrían sido dictadas y publicadas, si tienen o no fuerza de ley, y cuáles las autoridades, ministerios u órganos del Estado cubano que las refrendaron. "Hasta el momento, a pesar de haber intentado obtener esas informaciones, nunca me fue dada una respuesta, y no conozco ningún cubano que haya tenido acceso a las mismas", comentó López Linares.

Y concluye: "No querría terminar esta carta sin decirle que me duele profundamente la manera inexacta y superficial con que se refiere a la muerte de tantos de mis compatriotas que intentaron desesperadamente salir de Cuba. Manera inexacta, dramáticamente inexacta, porque Vd. se refiere a ‘centenares’ de cubanos fallecidos en el mar, siendo que son millares y tal vez decenas de millares. Superficial, porque Vd. hace recaer la responsabilidad principal de ese drama inimaginable en factores externos y no internos de Cuba. Trate de ver al menos una paja en el propio ojo. Y no quiera ver ‘calumnias’ donde sólo existen legítimas discrepancias de opiniones".

DI020905 Destaque Internacional